Poemas sueltos del ayer

I

Por entre los dedos
Suavemente y en silencio
Se va…
La pasión acumulada
La piel
La mirada
No tengo más remedio que abrir mis dedos
Para no dejar siquiera una gota
De lo sucedido

Por entre mis piernas
Se alejan tus piernas
Y quedo en un nido vacío
En un ánfora enclaustrado
Ni siquiera queda una gota de sudor…
Mis pies tiritan

Entre mis brazos
Solo quedan hojas secas
Entre mis uñas brotan ramas muertas
Y mis ojos se marchitan

Por entre mis narices
Nacen infértiles prados

Ya es tiempo
De dejar esta situación
Tomar el tren, no sé, tomar el bus
Dejarme llevar hacia no sé adonde
Para no dejar, mejor dicho,
Para detener de una vez esta situación
De que todo se va
De que todos se van
Y volver a construir mi cuerpo…
Aunque sea por partes.

II

No saco nada con decirte algo
Ya no importa
Pero esta maldita rutina
No nos deja tranquilo
Estoy obligado a llamarte
Debo soportar los esquizofrénicos estados de tu madre
Los días de mal humor
La cara seria de tu padre
Al maldito pajaron de tu hermano chico
Al estúpido de tu otro hermano y sus conversaciones sobre autos
Los días en que solo duermes
Tus retos
Tus trastornos espirituales
Tus doctrinas de Carreño
Y más encima
Debo hacerte el amor
Como quieres,
Cuando quieres
Y en donde quieres

No crees que ya es tiempo de irse a la mierda!


III

Es increíble
Pero hay gusanos en todo mi cuerpo
Me aterrorizo
No sé, me comen de a poco
Me engullen
Me mastican
Y más encima
Me apuntan con el dedo y me culpan!

IV

Después de haberte dado
Todo lo que he podido darte
No me pidas, por favor,
Que te espere

Ha sido un largo tiempo
El que ha transcurrido entre tú y yo
Pero hoy es tiempo de alejarse
Quizás de decir adiós

Sé que será difícil
Olvidar tus abrazos y tus besos
Pero el tiempo lo cura todo
Como la lluvia al suelo

Hoy es tiempo de dormir
Y esperar tranquilo el mañana
Solo sé que sin tu mirada…
El sol no me importa
El sol no me importa

A Denisse

A Denisse, poema de su padre adorado.















(Denisse con la camiseta de la selección chilena)



Hoy después de unas copas
Escribo estas líneas para ti
Hija adorada
El humo del cigarrillo
Aún no se apaga
Y mi alma trata de aferrarse
Al último candelabro encendido
Mientras sorbo a sorbo
Se acaba esta vida

A veces siento que mi ausencia
Es necesaria para tu diario vivir
Y que las lágrimas que derramo
No son sino un simple momento de lluvia

Tus ojos son la ventana que se abre de par en par
En aquellos días en que solo deambulo
Por estas calles húmedas, lúgubres y desiertas

Hija mía,
Cada sorbo de este licor lastimero
Hacen que tus momentos pasen por mi cabeza
Cuando naciste, cuando te deje en el jardín, cuando caminaste

Creeme!
A pesar de esta soledad eterna
Que cubre por completo mi vida
Siento que tu amor es lo único verdadero
Denisse,
Hija mía
Amor mío